Una de las cosas más maravillosas de los niños es su interés por descubrir todo lo que les rodea. La ingenuidad y la curiosidad los lleva a situaciones sorprendentes, y muchas veces también peligrosas.
El hogar familiar es el lugar dónde más tiempo pasan los pequeños, dónde comienzan a descubrir y dónde se enfrentan a los primeros peligros. Es por ello por lo que tener una vivienda segura para los niños es un elemento vital. ¿Cómo se consigue? En Ondomus Inmobiliaria te damos algunas ideas.
Habitación
Se trata de uno de los lugares favoritos de los niños. Si se encuentra en la planta superior, una barrera en la entrada y salida de las escaleras no vendría nada mal, así se evitará cualquier caída.
Normalmente, todos los peques tienen un baúl en su habitación donde guardan los juguetes. Pues bien, se puede adaptar para evitar que los niños se pillen los deditos.
Además, también existen topes para las puertas y tiras protectoras para evitar que, también en este caso, se pillen las manos.
Baño
Meter la mano en el inodoro para tocar el agua es una acción muy común en los niños. Por eso os proponemos un sistema de cierre de la tapa del baño. Además, evitará que se pillen los dedos.
Otra preocupación está en el mueble de las medicinas. Si está al alcance de los peques se puede solucionar con un sistema de bloqueo de puertas. Lo venden en cualquier ferretería y es muy fácil de instalar.
Por otro lado, la hora del baño es un rato más de juego antes de ir a la cama. Muchas veces están tan metidos en el juego que golpean sus cabecitas con el grifo. Pues también existe una protección para evitarlo.
Cocina
No hay nada más divertido que los muebles de la cocina. Escondites perfectos llenos de “cacharros” que hacen ruido. Cajones divertidos con objetos punzantes súper peligrosos y productos llamativos que son interesantes de probar. Al igual que para el mueble del baño, también podemos utilizar estos sistemas de bloqueo para evitar que cojan productos o artículos peligrosos.
Salón
Cables. Tan chulos para los ojos de los niños. Si los apartamos y los escondemos detrás de los muebles o los pegamos a la pared nos podremos evitar algún que otro susto. Muchos pequeños juegan con ellos a tirar o a colgárselos del cuello.
Ojo también con las estanterías y los libros. Protégelas para que no se les caigan encima. No queremos «ningún monito» trepando por los estantes, algo no muy raro entre los niños.
Exteriores
Si la casa dispone de piscina, es fundamental instalar una barrera para limitar el acceso a los más pequeños. Además, es fundamental mantener las herramientas del jardín recogidas, los niños se atreven con todo y cualquier cosa es un juguete nuevo para ellos.
Por último, si el hogar tiene balcones, existen mallas de seguridad para que los más pequeños no puedan asomarse. La curiosidad puede llevar a algún susto si no se toman las medidas necesarias.
Ya sabéis, que no os coja por sorpresa. Siempre se ha dicho que es mejor prevenir que lamentar y con estos tips vuestra casa estará “a prueba de niños”.